La muerte Janeth Gallardo, enfermera que prestó 12 años de servicio en el Hospital Regional San Juan de Dios, quien se habría quitado la vida tras recibir su memorándum de despido, ha generado gran malestar entre los trabajadores del sector salud, quienes ahora exigen la renuncia de las autoridades del Servicio Departamental de Salud (Sedes). La Gobernación, por su parte, ha deslindado responsabilidad en el hecho y ha pedido que el caso no sea politizado.
El inicio de la semana estuvo marcado por la trágica noticia del fallecimiento de una licenciada en enfermería, quien, según versiones preliminares, consumió órganos fosforados tras ser notificada de su despido. El Sindicato de Trabajadores en Salud, representado por Omar Velásquez, ha confirmado la existencia de memorandos de despido, a pesar de que las autoridades del Sedes negaron en días anteriores que se estaban ejecutando tales acciones.
Velásquez señaló que la situación ha generado indignación entre los trabajadores del sector, quienes cuestionan las decisiones tomadas por el director del Sedes, Oscar Camacho, y la responsable de Recursos Humanos. Los trabajadores en salud se reunirán este miércoles para discutir medidas y exigir el cambio inmediato de ambos funcionarios, a quienes consideran responsables por el manejo inadecuado de los despidos.
Además del retiro de las enfermeras, Velásquez denunció irregularidades en la contratación de personal de salud, acusando a las autoridades del Sedes de favorecer a familiares de operadores políticos. Según el dirigente, este tipo de manipulación en el proceso de contratación ha generado un clima de incertidumbre y descontento entre los profesionales del sector.
Edwin Valdez, presidente del Colegio Médico de Tarija, también ha criticado duramente al Sedes por la inestabilidad laboral que enfrenta el personal de salud, mencionando que se ha estado presionando a los trabajadores con amenazas de despido si no aceptan ser trasladados de un puesto a otro. Valdez señaló que estas decisiones arbitrarias han contribuido a la tragedia que terminó con la vida de la enfermera. Exigió respeto a los derechos laborales.
Respuesta de la Gobernación
El vocero de la Gobernación de Tarija, Carlos Baldiviezo, negó las acusaciones que hacen los trabajadores en salud. En contrapartida, cuestionó que se esté utilizando este hecho para hacer política y pretender empañar la gestión de la Gobernación.
Baldiviezo apuntó a la asambleísta Marina Cachambi de estar desinformando a la población, dando datos falsos en torno a la pérdida de la trabajadora en salud.
Baldiviezo señaló que desde la Gobernación no han tenido la intención de “lastimar” ni ejercer “presión política” como lo hace el MAS o lo hizo la agrupación política TODOS del exgobernador Adrián Oliva, en donde se despedía masivamente a los trabajadores.
“Nosotros no tenemos ese comportamiento, no lo hemos hecho y jamás lo haríamos”, aseguró.
